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Nuestro diario de viaje

Ir a Strasbourg

Strasbourg está situado en unos de los extremos del territorio francés, al noroeste. A unos 500 km de París, Lyon o Lille, la ciudad se encuentra mucho más alejada de las ciudades más al sur y al oeste, por ejemplo a 860 km de Nantes y a 950 km de Burdeos. Strasbourg está a 390 km de Ginebra y Suiza y a unos 430 km de Bélgica y Bruselas. Aunque podamos utilizar todo tipo de transporte para llegar a Berlín, desde el avión hasta la carretera pasando por el tren, unos son más atractivos que otros dependiendo del lugar de residencia. Aunque podamos utilizar todo tipo de transporte para llegar a Strasbourg, desde el avión hasta la carretera pasando por el tren, unos son más atractivos que otros dependiendo del lugar de residencia.

Strasbourg dispone de un aeropuerto internacional a 10 km del centro de la ciudad, el aeropuerto internacional de Strasbourg Entzheim. Es posible llegar al centro de la ciudad gracias a las navetas ferroviarias que comunican con la estación de Strasbourg en solo 9 minutos. Por 4€ obtienes un ticket combinado que te da acceso a la naveta y también a la red de Tram/bus con el fin de completar tu trayecto hasta tu objetivo final, a menos que prefieras llegar al centro de la ciudad a pie.
Pero cuidado, el servicio está cerrado después de las 22 o 23h según los días y los fines de semana. En lo referente a las compañías aéreas, puedes confiar en Air France, pero también en Easyjet, Ryanair o también Hop, la compañía regional de Air France que propone vuelos directos desde Burdeos, Marsella, Niza, Lyon, Toulouse, Lille y Nantes. Líneas internacionales que permiten también llegar a Strasbourg, por ejemplo con una línea desde Bélgica saliendo de Bruselas operado por Brussels.
Aunque Strasbourg se encuentra en el extremo del territorio francés, la ciudad se encuentra perfectamente conectada a través de la red ferroviaria europea. El trayecto desde el sureste de Francia beneficia del nuevo LGV entre Dijon y Mulhouse que permite acelerar los trayectos. Strasbour, con el TGV Este Europeo, puede unir en 2h25 con París. Cuenta con 3h45 desde Lyon, 3h30 desde Lille, unas 5h15 desde Nantes y 6h45 desde Burdeos. El tren puede también ser una solución desde Bélgica, con trayectos que pasan por París desde Bruselas con una duración de 4h30, duración equivalente al trayecto con correspondencia desde Suiza y Ginebra. Todos los trenes llegan a la estación central de Strasbourg, es decir, a las puertas de la antigua ciudad.
Es posible llegar a Strasbourg por carretera, puesto que la capital de Europa solo está alejada de Nancy por 160 km o Metz y 330 km desde Dijon por ejemplo. Viajar por carretera puede ser muy ventajosa para las regiones próximas, como Lorraine o Franche Comté, incluso aunque haya una oferta ferroviaria muy atractiva. Este modo de transporte presenta una ventaja presupuestaria real. Y si no puedes alquilar un autobús para el desplazamiento de tu grupo, las líneas regulares de autobuses se están desarrollando desde la liberación del sector, ofreciendo tarifas muy asequibles.

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Estrasbourg es uno de los diez centros urbanos más importantes de Francia con 770.000 habitantes y seguramente una de las ciudades más dinámicas del noreste de Francia. También es una de las « capitales de Europa », puesto que el parlamento europeo se encuentra situado en la ciudad, al mismo tiempo que numerosas organizaciones internacionales. Por todo ello, no es extraño que disponga de uno de los parques hoteleros más adaptados para organizar seminarios. Vamos a realizar una vuelta por los diferentes barrios de la ciudad. El corazón de Strasbourg está en el centro histórico, instalado en la elipsis insular en el que encontramos los monumentos faro de la ciudad, como la catedral o la gran plaza Kléber en el seno de un barrio que ha sabido guardar sus influencias medievales. Al oeste del centro de la ciudad se encuentra el barrio de la estación o barrio Kléber, donde se mezcla todo tipo de épocas, desde el más medieval hasta el más contemporáneo. Al sur del viejo centro de la ciudad se encuentran los barrios de Krutenau y la esplanada, dos barrios de estudiantes y de los más animados de la ciudad. Al lado de estos barrios, al extremo de la gran Isla clasificada patrimonio de la Unesco se encuentra el pintoresco barrio de la Petite France, muy apreciada por los turistas por sus canales, sus fachadas de entramados y sus restaurantes. Al este de la vieja ciudad, el barrio del consejo de los quince forma parte así como los precedentes de la Neustadt, esta expansión de la ciudad decidida a finales del siglo XIX, donde encontramos las instituciones europeas (parlamento europeo, Consejo de Europa) pero también el parque de la Orangerie, verdadero pulmón de la ciudad, alrededor del cual se ha desarrollado un barrio residencial muy burgúes. Un nuevo barrio de negocios internacional se están desarrolando en el barrio Wacken, más allá del barrio del consejo de los quince, donde se encuentra un polo económico importante pero también el centro de congresos de la ciudad. En función de tus necesidades Groupcorner te ayudará a seleccionar los establecimientos correspondientes, por su localización y equipamiento.